Una invitación a la investigación: rutas, certezas e incertidumbres del proceso investigativo cualitativo en comunicación

 

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Reseña del libro Orozco, Guillermo y González, Rodrigo (2011): Una coartada metodológica. Abordajes cualitativos en la investigación en comunicación, medios y audiencias, Ed. Tintable, México.

Por Marta Rizo García, Universidad Autónoma de la Ciudad de México

Son muchos los manuales de metodología que exponen, con mayor o menor detalle, los pasos a seguir para elaborar una investigación en el ámbito de las ciencias sociales. También son varios los títulos que se centran, específicamente, en la investigación en el área de la comunicación y los medios. Una coartada metodológica. Abordajes cualitativos en la investigación en comunicación, medios y audiencias es un libro de metodología, sin duda, pero no es un libro de metodología común, toda vez que no está organizado a modo de listado de recetas a aplicar, pasos a seguir y técnicas a aplicar para obtener conocimientos en torno a algún fenómeno.

Es algo digno de celebrar el que se publique un libro que, siendo de metodología, no se pretenda erigir como El Manual donde todo queda explicado sin lugar a dudas, sino más bien como un libro de invitación a la investigación. Un libro donde, sí, efectivamente, están explicados con detalle, con un lenguaje ameno colmado de ejemplos cotidianos que facilitan la comprensión y con el rigor académico propio de un libro de metodología, los elementos que todo investigador social debe tomar en cuenta a la hora de elaborar un proyecto de investigación que permita que ésta se lleve a cabo de forma óptima. Un libro donde sí, los autores, exponen los pormenores del proceso investigativo: desde cómo construir un objeto de estudio a partir de un tema de interés general y cómo plantear preguntas de investigación acordes con los objetivos, hasta desde qué paradigma teórico es más pertinente proponer un trabajo de investigación, pasando por la exposición de conceptos como metodología, método, técnica, instrumento, teoría, entre muchos otros -conceptos, todos ellos, en torno a los que todo investigador debe tener cabal claridad a la hora de iniciar una pesquisa- y la definición clara y concisa de algunas de las técnicas de investigación cualitativas más pertinentes para la investigación en comunicación. A decir de los propios autores, el libro se propone “abandonar la idea de una metodología aséptica, basada en recetas aplicables, y cambiar a una posición de generación de conocimiento creativa y rigurosa” (p. 11). Creatividad y rigor son dos de los criterios que Orozco y González reivindican como fundamentales del proceso de investigación social. Otros criterios, no menos importantes, son la honestidad, la crítica o el sentido social, el compromiso y la voluntad de transformación.

El libro está conformado por ocho capítulos. Los dos primeros plantean las coordenadas necesarias para comprender qué es la investigación y cómo se desarrolla. El tercer capítulo expone de forma clara y sintética los detalles de los principales paradigmas que enmarcan diversas opciones metodológicas para conformar investigaciones en el ámbito de lo social en general, y de la comunicación en particular. El cuarto capítulo se centra en la distinción entre las perspectivas cuantitativas y cualitativas en investigación, y lejos de imponer el criterio de mutua exclusión, los autores abogan por el ideal de la integración y complementariedad de ambas miradas. En el quinto capítulo, Orozco y González discuten algunas de las principales implicaciones –tanto de corte político como pedagógico- de los abordajes cualitativos en investigación. El sexto capítulo se centra en uno de los objetos posibles de la investigación cualitativa en comunicación, las audiencias, área temática sobre la cual Guillermo Orozco ha desarrollado trabajo teórico y empírico de gran calidad y reconocimiento en las últimas décadas en México y América Latina. El séptimo capítulo presenta las principales corrientes de investigación para los estudios de audiencia y recepción de los medios de comunicación, un área de notable desarrollo y con mucha trayectoria histórica en el espacio latinoamericano. El último capítulo ofrece a los lectores una serie de herramientas informáticas que pueden ayudar a los procedimientos de organización y análisis de los datos generados en las investigaciones de corte cualitativo; herramientas que, muy a menudo, asociamos casi automáticamente con la investigación de corte cuantitativo, pero como se demuestra en esta obra, pueden ser muy útiles para el procesamiento de datos cualitativos y la consecuente interpretación de información.
Una coartada metodológica. Abordajes cualitativos en la investigación en comunicación es una guía que pretende fortalecer la formación en investigación. En este sentido, está dirigido no sólo a investigadores noveles, sino también a docentes de cursos relacionados con la metodología de la investigación. Si bien el libro va más allá de lo que se expone en los manuales de metodología más comunes y a los que estamos más acostumbrados, no plantea, a decir de los propios autores, “complicaciones innecesarias” (p. 15), y a partir de ejemplos claros y muy puntuales, desentraña los elementos básicos del proceso de producción de conocimiento que sustenta cualquier investigación y, de alguna manera, contribuye a desmitificar la labor de la investigación científica, a menudo percibida como excesivamente complicada.

Además de todo lo anterior, la obra incluye varias reflexiones en torno a la naturaleza de la investigación de la comunicación, específicamente en el ámbito latinoamericano. Asuntos como el peso histórico del positivismo cuantitativo, la necesaria interdisciplinariedad de la investigación social, la integración metodológica y la importancia del involucramiento del investigador a lo largo de todo el proceso investigativo son expuestos con sencillez y, a la vez, rigor académico. Los lectores de Una coartada metodológica. Abordajes cualitativos en la investigación en comunicación podrán apreciar que, lejos de imponer posturas y modos de hacer, los autores exponen toda la amplia variedad de opciones (paradigmáticas, teóricas, metodológicas, técnicas, etc.) que tenemos a nuestro alcance quienes nos dedicamos a la investigación en comunicación, así como aquellos que están iniciando su formación en el área.

En el libro encontramos, así entonces, elementos expositivos que, sin duda alguna, son de gran ayuda en el antes, el durante y el después de todo proceso investigativo. Los pasos previos indispensables para la elaboración y diseño de un proyecto de investigación (elección del tema, construcción del objeto de estudio, delimitación de supuestos de partida, diseño de la estrategia metodológica, elección de técnicas de investigación, decisión acerca de los paradigmas y teorías más pertinentes, etc.) son explicados con naturalidad y sencillez, y la inclusión de ejemplos (no necesariamente relacionados con el campo de la comunicación) hace la lectura agradable y de fácil comprensión aún y para aquellos lectores que a penas estén iniciándose como investigadores, incluso para los estudiantes de comunicación que, quizás sin tener la clara voluntad de dedicarse a la investigación, están elaborando trabajos que implican un proceso de investigación. El durante de la investigación es abordado por Orozco y González a partir de cuestiones nodales como la reflexividad metodológica, la flexibilidad, los riesgos inherentes a todo proceso investigativo y el involucramiento del investigador, entre otros aspectos. Por último, los autores proponen algunos criterios y herramientas para el análisis de la información obtenida del trabajo de campo, así como para la interpretación de los resultados.

Un último apunte que vale la pena poner de manifiesto es que Una coartada metodológica. Abordajes cualitativos en la investigación en comunicación es un libro actual, pese a tener su antecedente editorial más inmediato en la obra del mismo Guillermo Orozco que editaron 15 años antes (en 1997) la Universidad Nacional de La Plata (Argentina) y el Instituto Mexicano para el Desarrollo Comunitario (México), bajo el título La investigación en comunicación desde la perspectiva cualitativa. La actualidad y pertinencia temporal de la obra se observa no sólo en la inclusión de los debates más recientes en torno a las ciencias sociales y las ciencias de la comunicación, y en la referencia a espacios conceptuales y marcos teóricos propios del presente siglo (por citar un ejemplo, la propuesta de las Hipermediaciones de Carlos Scolari), sino, y sobre todo, en la inclusión de muchos ejemplos de temas y objetos de estudio relacionados con las tecnologías de información y comunicación y con las redes sociales digitales, entre otros temas de plena vigencia hoy en día, sobre todo por los acelerados cambios a los que se ven sometidos los fenómenos comunicativos en la actualidad.

Una coartada metodológica. Abordajes cualitativos en la investigación en comunicación dará de qué hablar en el espacio educativo y académico de la comunicación, especialmente en el ámbito latinoamericano. Se trata de una obra de obligada lectura para docentes y estudiantes de comunicación, para investigadores noveles y para aquellos investigadores que, aún y teniendo un trabajo consolidado en el campo, buscan “refrescar” la memoria para no perder de vista los elementos indispensables que hay que tomar en cuenta para realizar investigación social cualitativa.

La investigación es un proceso creativo, y este libro da cuenta de ello de forma, también, creativa, amena y muy sugerente.

 

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