El acceso generalizado a dispositivos con conexión a internet ha sido uno de los factores determinantes para la transformación del consumo de la información de actualidad entre los distintos sectores de audiencias. Estos cambios se derivan, en parte, de un mayor espectro en los canales de información más allá de accesos convencionales a los medios de comunicación. En el ámbito digital es relevante la incorporación de noticias en plataformas y redes sociales (Catalina-García et al., 2021), que facilitan la comunicación y una difusión instantánea (Aïmeur et al., 2023).
También es significativo el incremento de otros canales para compartir noticias a través de servicios de mensajería o de plataformas como Reddit, que posibilita la creación de comunidades en torno a noticias agregadas por los usuarios (Mok et al., 2023). Los grupos y medios de comunicación también se han adaptado a estos nuevos consumos al dirigir sus contenidos en formatos multimedia y multicanal en una convergencia mediática cada vez más frecuente (Solimani y Ahmed-Mohamedm 2024). Estos medios y grupos aplican estrategias como las notificaciones en móviles (De Solá-Pueyo, 2023) o incorporan la táctica de los clickbaits, aunque incida negativamente en su credibilidad (Kaushal y Vemuri, 2021).
Los nuevos consumos no han reemplazado aún a los tradicionales, pero sí están irrumpiendo con fuerza, sobre todo entre jóvenes y generaciones posteriores que han crecido en entornos mediáticos híbridos, cuya consecuencia importante es un cambio en las rutinas informativas, y a no particularizar su interés en determinados medios (Wunderlich et al., 2022). Todo ello aumenta el acceso a la información en estos públicos, aunque sin profundizar en ella (Ceballos del Cid et al., 2024). Si bien continúan siendo importantes para estas audiencias los medios de comunicación tradicionales, principalmente la televisión por la influencia familiar y parental (Feio y Oliveira, 2024; Dennen et al., 2021), su canal más recurrente está conformado por las redes sociales y fuentes no tradicionales (Anderson, 2025).
Este aumento del espectro de consumo lleva implícita la ampliación del concepto tradicional de noticia, principalmente entre los jóvenes, que consideran que noticia puede ser cualquier información reciente. Atribuyen una perspectiva de su relevancia también diferente, porque las informaciones no tienen por qué ser relevantes en general o para todos, sino para ellos mismos (Swart y Broersma, 2024). Asimilan la noticia con contenidos que les son útiles, incluidos los relacionados con el entretenimiento (Wunderlich et al., 2022), se interesan más por las informaciones muy cortas, prácticamente telegráficas (Boczkowski et al., 2017) y audiovisuales (Solimani y Ahmed-Mohamed, 2024). Todo ello revierte en nuevas fuentes, como la figura del influencer que cada vez se posiciona más sobre una multiplicidad de temas, incluidos los políticos y sociales (Peter y Muth, 2023).
Esta percepción de qué es noticia y el fácil acceso a todo tipo de información conducen a un consumo global con mayor diversidad de fuentes y un interés en contenidos más allá de un entorno cercano (Widholm, 2019). Ello puede ayudar a las audiencias a valorar los contenidos de actualidad y establecer relaciones con el intercambio de noticias (Anderson, 2025). Sin embargo, se evidencian otras consecuencias no tan positivas. Por un lado, la recurrencia a una segunda pantalla, que puede conllevar a un mayor nivel de interés en el contenido informativo, pero también a una fragmentación de la atención y a una menor retención de la información (Lowenstein-Barkai y Lev-On, 2021). Por otro, propicia el acceso incidental a partir del fenómeno News Find Me por el cual se incrementa la percepción de que ya no hace falta buscar noticias para sentirse bien informados (Gil de Zúñiga y Cheng, 2021).
Igualmente, es relevante la creciente preocupación por la desinformación, principalmente en redes sociales (Shu et al., 2020), problema que, lejos de ser solucionado, se agrava con los nuevos retos que provoca la irrupción de la inteligencia artificial (Salaverría y Cardoso, 2023). Estos son solo algunos de los aspectos que trae consigo la transformación del consumo informativo. La investigación debe seguir interesándose por estas y otras consecuencias derivadas de los nuevos accesos a las noticias, de su reconceptualización, de su percepción entre los distintos públicos y de la confiabilidad que entrañan tanto los contenidos como los medios, fuentes y canales por los que se difunden.
Este monográfico, por tanto, invita a profundizar en los hábitos de consumo de la información de actualidad y las implicaciones en los cambios de las rutinas mediáticas, que han provocado la ampliación de qué es noticia, la adaptación de los medios convencionales y el auge de plataformas digitales y medios sociales. Esta transformación amplia cuantitativamente el acceso informativo en el sentido de recurrencia a mayor número de fuentes y a un interés por las informaciones más allá de los límites geográficos y temporales; pero afecta a lo cualitativo en términos de desinformación, de una confianza puesta en tela de juicio hacia los medios periodísticos y de una discutible autopercepción de las audiencias sobre qué es estar bien informado, principalmente entre generaciones jóvenes, pero también entre la población adulta.
Ejes temáticos:
- Consumo de información de actualidad e implicación entre las distintas audiencias.
- Nuevos medios y canales para la difusión de noticias y adaptación de los medios convencionales.
- Jóvenes y noticias: nuevas formas de acceso y evitación.
- Algoritmos y personalización del consumo de noticias. Impactos en la pluralidad informativa.
- Segmentación y especialización: impacto en el consumo de información de actualidad.
- Percepción e interés por la información entre las audiencias.
- Motivaciones y gratificaciones para acceder a las noticias.
- Pasado y presente de la recepción de noticias y del uso de los medios periodísticos
- Las redes sociales y otras plataformas digitales como primera y/o segunda pantalla.
- Reconceptualización de la noticia. La influencia de los medios y de los hábitos de consumo.
- Consecuencias de los nuevos accesos: el consumo incidental, la proliferación de la desinformación.
- La gestión de la información entre los destinos públicos. Confiabilidad, creación de contenidos y su compartición.
- Consumo de noticias, confianza y credibilidad de las fuentes.
- El rol de la emoción en la circulación y consumo de la información de actualidad.
- Consumo de información y polarización política.
- La evitación de las noticias y el cansancio informativo. Estrategias y conductas.
- Las nuevas comunidades digitales en torno a la información.
- La desinformación y su gestión. Fuentes y canales. Oportunidades y riesgos de la IA en torno a la información de actualidad.
- Información periodística ¿vs.? Información no periodística. Influencers y otros constructores de opinión.
- Implicaciones sociales y políticas en torno a la información de actualidad y a los canales de acceso de noticias.
- Nuevos y “viejos” métodos para investigar el consumo de noticias.
Palabras Clave:
Noticias, información de actualidad; audiencias de noticias, canales y fuentes para la información; adaptación de los medios convencionales; reconceptualización de la noticia; usos y riesgos en la información de actualidad.