+ info: Universo Abierto
Una universidad holandesa de Utrecht dice que está dejando formalmente de tener en cuenta el factor de impacto, una medida estándar del éxito científico, en todas las decisiones de contratación y promoción. Para principios de 2022, todos los departamentos de la Universidad de Utrecht en los Países Bajos juzgarán a sus académicos según otros estándares, incluido su compromiso con el trabajo en equipo y sus esfuerzos para promover la ciencia abierta, dice Paul Boselie, investigador de gobernanza y líder del proyecto para el nuevo programa de acreditación Recognition and rewards. “Los factores de impacto no reflejan realmente la calidad de un investigador o académico individual”, dice. “Creemos firmemente que algo tiene que cambiar y abandonar el factor de impacto es uno de esos cambios”.
El factor de impacto de un científico es una puntuación que tiene en cuenta el número de publicaciones y la tasa de citas de las revistas donde se publican esos artículos. En este sistema, los artículos de revistas muy citadas como Science, Nature o Cell cuentan más que los artículos de revistas cuyo contenido se cita con menos frecuencia. Boselie dice que los factores de impacto, así como una medida relacionada llamada índice h, contribuyen a una “producción” de la ciencia que valora la producción pura sobre la buena investigación. “Se ha convertido en un modelo muy dañino que va más allá de lo que es realmente relevante para la ciencia y de promover la ciencia”, dice.
El nuevo esquema es parte del programa Open Science de Utrecht, un esfuerzo de múltiples vías para hacer que la investigación sea más transparente y cooperativa. Los gestores de los programas de ciencia abierta integrados en cada departamento evaluarán el progreso hacia la publicación de acceso abierto, la participación pública y el intercambio de datos.
La decisión de renovar la contratación y la promoción se ha inspirado en parte en la Declaración sobre Evaluación de la Investigación (DORA), un documento creado en 2012 en la reunión anual de la Sociedad Estadounidense de Biología Celular.
La declaración tiene como objetivo “mejorar las formas en que se evalúan los investigadores y los resultados de la investigación académica” y pide específicamente eliminar los factores de impacto como una forma de juzgar el mérito de los académicos. Hasta el momento, ha sido firmado por casi 20.000 personas e instituciones. La Universidad de Utrecht firmó el documento en 2019.
Entre los investigadores académicos, la insatisfacción con el uso y mal uso del factor de impacto en las evaluaciones y decisiones de permanencia, promoción y contratación ha aumentado en los últimos años. Un informe de 2018 calificó el factor de impacto como “una medida inadecuada para evaluar el impacto de los científicos” y concluyó que si no se modifica el sistema de evaluación actual es probable que se produzca un “comportamiento continuo que no siempre ha concluido en un comportamiento social positivo”.
Todas las universidades de los Países Bajos, incluida Utrecht, se han adherido a ‘Room for Everyone’s Talent’, un documento de posición de 2019 dirigido por VSNU, la asociación de empleados de las universidades holandesas. Ese documento pide un sistema de reconocimiento y recompensas que “permita la diversificación y vitalización de las trayectorias profesionales”.
Aún así, eliminar las métricas estándar podría ser un movimiento arriesgado para la universidad y sus profesores y miembros del personal. Mientras otras universidades sigan dependiendo de los factores de impacto y otras métricas de productividad para la contratación y la promoción, los investigadores que surgen a través del sistema de Utrecht podrían estar en desventaja competitiva.