La teoría queer, (siempre) en construcción

Amparo Huertas Bailén, directora del Máster en Comunicación LGTBI+ (InCom-UAB), reflexiona a partir de un artículo publicado en la revista Athenea Digital 

Desde este espacio nos gustaría poder contribuir a la comprensión de la teoría queer con argumentos sólidos y solidarios, pero sin eludir dudas y preguntas.

Con este objetivo, les recomendamos que lean este artículo:

Liu, Wen (2020). Sentir abatido, regresivo y maquínico: Teoría queer y el giro afectivo. Athenea Digital, vol. 20, num. 2.

Liu Wen (2020). Feeling down, backward, and machinic: Queer Theory and the afective turn. Athenea Digital, vol. 20, num. 2.

Pero, para ir entrando en debate, queremos destacar algunas ideas:

Sobre la teoría queer
  • «Surgida en los círculos académicos y activistas en los años noventa, la teoría queer se resiste a la concepción identitaria de la política que los movimientos liberales prometen, y se niega a territorializar el alcance de su objeto de estudio».
  • A partir de la lectura de What Does Queer Theory Teach US about X? (Lauren Berlant y Michael Warner, 1995), el texto destaca que la teoría queer, ampliamente constitutiva de una crítica creciente de los modelos normativos de sexo, género y sexualidad, aspira a crear públicos que examinen y piensen de manera diferente sobre el privilegio y la lucha en los distintos campos de poder.
  • El afecto queer conceptualiza la vida erótica más allá del pensamiento dicotómico que distingue entre normalidad y antinormalidad, relacionalidad y antisocialidad, lo público y lo íntimo, la vergüenza y el orgullo, la opresión y la liberación.
  • Si todo se reduce a la sexualidad, es imposible avanzar en el pensamiento sobre lo queer.
La clara conexión entre teoría queer y feminismo
  • «El giro afectivo relativo al marco del sentir abatido no es necesariamente un nuevo paradigma teórico, sino una continuación del método analítico feminista de que ‘lo personal es político'»: «El ‘giro queer’ desafía persistentemente las identidades establecidas institucionalmente como ‘mujeres’ u ‘homosexuales'».
Las limitaciones (errores) de la respuesta política al movimiento queer
  • El texto también plantea que la conexión entre el estado y la política gay y lesbiana hegemónica es cada vez más problemática: «el estado despliega la sexualidad como un mecanismo de normalización y control»; «las nociones de orgullo, seguridad y felicidad (…) son el resultado de la preocupante alianza del movimiento LGBTQ hegemónico con el capitalismo neoliberal, más que el resultado de políticas progresistas o transformación social».
  • La relación paradójica entre lo queer y la modernidad: «El futuro cada vez más asequible de la normalización de gays y lesbianas (…) pone un sello temporal en el sufrimiento queer como algo que sólo pertenece al pasado, donde lxs sujetos marginadxs -lxs no blancxs, lxs perversxs, lxs irracionalxs y lxs transgresorxs de género- encuentran obstáculos extraños al progreso y al avance».
Más pistas para pensar sobre lo íntimo/lo privado/lo público
  • La incomodidad como una nueva forma de socialidad y apertura: «Los sentimientos de incomodidad o dolor queer no se originan en la identidad sexual per se, sino en el trabajo mundano y repetitivo en el que los sujetos queer son forzados a cumplir y mantener espacios heteronormativos a medida que sus cuerpos se encuentran con ellos en la interacción diaria»
Los cuerpos racializados, en la periferia académica
  • La Teoría queer se centraliza en una referencia norteamericana de la experiencia queer.
  • Este problema se hace evidente en los discursos sobre la normalización de los cuerpos: «los regímenes biomédicos y farmacéuticos reclutan cuerpos con diferentes capacidades para producir sujetos neoliberales. El sentir maquínico cuestiona qué cuerpo se considera flexible y qué cuerpo es visto como incapaz de transformarse y modificarse. En otras palabras, la crítica afectiva queer de la forma humana problematiza cómo el cuerpo blanco masculino queer y trans* en el Norte Global es asignado con mayor capacidad agentiva y móvil al decapitar los cuerpos racializados en el Sur Global, excluyéndolos de la forma humana sexual y de género».

Advertencia final: El artículo reseñado, además de interés previo, requiere una lectura pausada.